Con la ayuda de instructores humanos, un robot ha aprendido a hablar como un bebé humano, el aprendizaje de los nombres de las formas simples y colores."Nuestro trabajo se centra en las primeras etapas análogas a las características de un niño humano de alrededor de 6 a 14 meses, en primer lugar la transición del balbuceo a la formas de la palabra," escribieron los científicos informáticos dirigidos por Caroline Lyon, de la Universidad de Hertfordshire, en un 13 de junio la Biblioteca Pública of Science One.
Nombrado DeeChee, el robot es un iCub , un niño de tres metros de altura de fuente abierta de la máquina humanoide diseñado para parecerse a un bebé. La similitud no es meramente estético, tambien tiene un propósito funcional: Muchos investigadores creen que ciertos procesos cognitivos están determinados por los órganos en que se producen. Un cerebro en una cubeta puede aprender de manera muy diferente que un cerebro en un cuerpo.
Este campo de estudio que se llama conocimiento corporal y en el caso DeeChee se aplica al aprendizaje de los bloques de construcción del lenguaje, un proceso que en el ser humano está conformado por una exquisita sensibilidad a la frecuencia de los sonidos.
Usando DeeChee también permitió a los investigadores cuantificar la transición de la algarabía de formas de las palabras reconocibles en detalle, el establecimiento de vínculos estadísticos entre las frecuencias de sonido y el rendimiento del robot que eventualmente pudiera informar a la investigación sobre el aprendizaje humano.
Para estar seguro, DeeChee todavía no piensa como un bebé humano. No tiene el software.Preguntado sobre si este proceso de aprendizaje podría combinarse con programas de alto nivel cognitivo para producir algo así como la conciencia, Lyon dijo: "Primero tenemos que preguntarnos qué es la conciencia?"
fuente: (Lyon et al. / PLoS One)
