lunes, 6 de agosto de 2012


Los demás sistemas descubiertos anteriormente tenían órbitas desordenadas y excéntricas.
Investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts, usando los datos del telescopio Kepler de la NASA, descubrieron lo que creen podría ser un sistema planetario similar a nuestro Sistema Solar.
Esto puede ser un hallazgo muy importante para la comunidad científica ya que nuestro Sistema Solar sigue una alineación relativamente ordenada, en que cada uno de sus planetas están dando vuelta en base a un mismo plano, sin embargo, los demás sistemas planetarios descubiertos anteriormente tenían órbitas muy excéntricas.
Solo ahora, a 10 mil años luz de distancia, se encontró este sistema planetario organizado regularmente como el nuestro. Se trata de la estrella Kepler 30, con un brillo y masa similar al Sol.
Kepler 30, que gira tal cual como el Sol en un eje vertical, mientras que sus tres planetas tienen órbitas en un mismo plano.
"En nuestro sistema solar, la trayectoria de los planetas es paralela a la rotación del sol, lo que demuestra que probablemente se formaron a partir de un disco giratorio", dice Roberto Sanchis Ojeda, graduado de física de MIT, quien está a cargo de la investigación.
"Este sistema (Kepler 30), nos muestra que sucede lo mismo", agrega el físico.
Él cree que estos hallazgos, publicados el 25 de julio por MIT, podrían ayudar a explicar los orígenes de ciertos sistemas planetarios lejanos y al mismo tiempo arrojar luz sobre nuestros vecinos en el espacio.
“Pienso que el sistema solar no es un golpe de suerte", revela el profesor de MIT, Josh Winn, co-autor del artículo.
"El hecho de que la rotación del sol esté alineada a las órbitas de los planetas, no creo que sea una coincidencia rara".
Según Winn, el hecho de que existan otras configuraciones planetarias, que por el contrario, son diferentes e irregulares, y que tienen planetas del tamaño de Júpiter, muy calientes y cercanos a su estrella, orbitando velozmente en cuestión de horas o días, podría ser causa de desajustes en su mismo origen.
El profesor señala que sus órbitas pueden haber sido golpeadas y torcidas en una época muy temprana de la formación de un sistema planetario, cuando posiblemente varios planetas gigantes se acercaron lo suficiente. Al ocurrir ésto, ayudaron a dispersar a algunos planetas fuera del sistema y acercar a otros a sus estrellas.
Recientemente los científicos identificaron una serie de sistemas con planetas muy calientes, similares a Júpiter, todos los cuales tienen órbitas inclinadas.
Para probar realmente esta teoría a la cual llaman "dispersión planetaria", Winn, sostiene que los investigadores tienen que identificar aún más sistemas planetarios que no contengan estos planetas calientes tipo Júpiter, y que contengan planetas que orbiten más lejos de su estrella en forma ordenada.
Si el sistema descubierto recientemente se alineó como nuestro sistema solar, sin inclinación orbital, proporciona una evidencia más de que sólo los sistemas con planetas muy calientes como Júpiter están mal alineados, como resultado de la teoría de la dispersión planetaria.
fuente:lagranepoca.